En una acción aparentemente espontánea, suenan los primeros acordes del Aleluya de Händel. Obra compuesta en 1.741 y que aunque no se refiere exclusivamente a la Navidad, sino a toda la vida de Jesucristo, está especialmente ligada a esta celebración.
Ante la sorpresa generalizada, miembros del coro y espontáneos se van uniendo a la música.
Si los que podemos disfrutar del vídeo no podemos quedarnos indiferentes, supongo que las personas que se vieron involucradas en su representación, voluntaria o involuntariamente, jamás lo olvidarán.
A veces, cuando el día a día, la presión de los resultados, las acciones de comunicación tácticas, ... nos llevan a hacer de nuestra profesión una actividad previsible, levantar la cabeza y recordar que disponemos de una herramienta que puede aportar sensaciones y experiencias únicas e inolvidables me hace disipar dudas y recuperar el orgullo de vivir de una profesión tan apasionante.
Feliz Navidad